La pandemia de COVID-19 ha motivado a la Comisión Europea a replantear sus objetivos en materia de salud y seguridad ocupacional. Es así como la institución elaboró un marco estratégico para atender la integridad de los trabajadores para el lapso 2021-2017.
La Comisión Europea plantea, a partir de que el concepto del lugar de trabajo empieza a ser más complejo a medida que emergen nuevas formas de organización, modelos de negocio y sectores, tres objetivos transversales para los próximos años.
- Anticipar y gestionar el cambio en el nuevo mundo del trabajo que han traído consigo las transiciones ecológica, digital y demográfica.
- Mejorar la prevención de los accidentes y las enfermedades en el lugar de trabajo.
- Aumentar la preparación frente a posibles crisis sanitarias en el futuro.
A su vez, la aplicación de estos objetivos estará sustentada por el diálogo social, el refuerzo de la base documental, el refuerzo del cumplimiento de la legislación, la sensibilización y la financiación.
En lo que respecta a anticipar y gestionar el cambio, la Comisión Europea considera la modernización y simplificación de las normas de la UE en materia de salud y seguridad en el trabajo en el contexto de las transiciones ecológica y digital. A esto también se suma los riesgos psicosociales por la introducción de nuevas tecnologías laborales en la vida privada de los empleados.
«La Comisión también ha propuesto que se revise la Directiva relativa a las máquinas, que aborda los riesgos derivados de la digitalización y el uso de máquinas que también son relevantes para la salud y la seguridad de los trabajadores. Además, ha propuesto el primer marco jurídico sobre inteligencia artificial (IA), que aborda los riesgos de determinados sistemas de IA que se utilizan en el empleo, la gestión de los trabajadores y el acceso al autoempleo», reza el documento.
La Comisión sostiene, acerca de la prevención de accidentes, la importancia de atender a las enfermedades cardiovasculares profesionales, como las enfermedades coronarias o el derrame cerebral. «Aunque las enfermedades cardiovasculares son la segunda causa principal de la mortalidad laboral en la UE, se sabe muy poco de sus causas subyacentes y su vinculación con los riesgos relacionados con el trabajo», sostuvo la institución. A estas políticas se suma las campañas para fomentar la salud laboral y regular la exposición a sustancias peligrosas.
Finalmente, la Comisión propone aumentar la preparación frente a posibles crisis sanitarias en el futuro a través de la actualización de las directrices laborales concernientes a la SST.
«De manera paralela, el SARS-CoV-2 se clasificó al amparo de la Directiva sobre agentes biológicos mediante un procedimiento de urgencia. La decisión ayuda a garantizar la protección de los trabajadores en instalaciones en que se manipula el virus de manera directa, como en los centros de producción y distribución de vacunas. Ahora, la Comisión supervisará su aplicación y elaborará orientaciones para que los inspectores de trabajo puedan ayudar a asegurar la correcta ejecución de las medidas», reza el documento.
Puedes leer aquí el comunicado completo de la Comisión dirigido al Parlamento Europeo.
- Seguridad en altura: tipos de sub sistemas para detención de caídas - 5 diciembre, 2024
- El burnout laboral, un problema creciente en el entorno empresarial - 5 diciembre, 2024
- Tipos de arnés de cuerpo completo para trabajos en altura - 3 diciembre, 2024
Deja una respuesta