El personal de salud forma parte de la primera línea de batalla contra el coronavirus, un agente infeccioso que el Organismo Mundial de Salud (OMS) ha declarado como pandemia. Por esta razón, los procedimientos de higiene en las instalaciones sanitarias son fundamentales para evitar el incremento la tasa de contagio del COVID-19, así como la descontaminación del personal médico que está expuesto durante la atención a los pacientes confirmados y sospechosos de infección.