El estrés es un problema potencialmente peligroso y hasta fatal para las empresas. La naturaleza humana está diseñada con un conjunto de respuestas automáticas para enfrentar el estrés, reaccionando de manera similar a diferentes tipos de estresores. Sin embargo, esta capacidad innata puede volverse contraproducente en situaciones de estrés continuo en el ambiente laboral.
El problema radica -según el Canadian Centre for Occupational Health and Safety (CCOHS)– en que el organismo responde de la misma manera a todas las formas de estrés, activando un sistema de alerta que, idealmente, debería encenderse y apagarse según las necesidades. Cuando hay niveles bajos pero constantes de estrés, el organismo permanece activado sin la oportunidad de apagarse y recuperarse adecuadamente. Este estado de alerta puede llevar a una serie de problemas de salud física y mental para los trabajadores.
El estrés crónico, incluso, puede contribuir al desarrollo de enfermedades mentales como la ansiedad y la depresión. Por ello, CCOHS ha compartido una lista de todos riesgos a los que los trabajadores están expuestos por culpa del estrés.
Efectos comunes del estrés
- Dolor de cabeza
- Tensión muscular o dolor
- Dolores en el pecho
- Aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial
- Sistema inmunológico debilitado
- Fatiga / insomnio
- Problemas estomacales y digestivos
- Nivel alto de azúcar en la sangre
- Aumento del colesterol y los ácidos grasos en la sangre para los sistemas de producción de energía.
Efectos psicológicos
- Aumento del olvido, ansiedad, inquietud, irritabilidad, actitud defensiva, cambios de humor, hipersensibilidad, ira, etc.
- Disminución de la capacidad para pensar con claridad o concentrarse
Incidentes causados por el estrés
- Dormir mal
- Automedicarse o sobremedicarse
- Sentirse deprimido
- Sentirse ansioso, nervioso y nervioso
- Volverse enojado e imprudente (a menudo debido a una sensación de injusticia o injusticia)
Consecuencias del estrés en las personas
- Distraerse momentánea y peligrosamente
- Sentirse retraído o aislado de los demás
- Tener arrebatos
- Descuidar responsabilidades
- Cometer errores de juicio
- Poner el cuerpo bajo estrés físico, aumentando el potencial de torceduras y esguinces.
- Reaccionar mal en actividades normales que requieren coordinación mano-ojo o pie-ojo
Consecuencias del estrés a largo plazo (crónico)
- Ansiedad
- Insomnio
- Dolor muscular
- Hipertensión
- Sistema inmunológico debilitado
- Cardiopatía
- Depresión
- Obesidad
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