De manera didáctica, la División de Salud Ocupacional y Seguridad Ambiental de 3M Chile explica las características de los principales tipos de respiradores. Asimismo, menciona otras maneras de protección de las vías respiratorias.
A continuación, se presentará extractos de su Guía de Protección Respiratoria, que permite conocer los criterios básicos que se debe tener siempre presente para su selección.
Protección natural del cuerpo
El cuerpo humano tiene un prodigioso sistema respiratorio que lleva aire y oxígeno a los pulmones y elimina productos de desecho. Sin embargo, pese a que uno esté expuesto al aire fresco y normal, las defensas del organismo siguen funcionando para limpiar y purificar el aire que respira.
- Pelos de la nariz: su primera línea de defensa son los pelos interiores de la nariz, que atrapan partículas cuando una persona inhala.
- Cilios: pelitos que tapizan el conducto respiratorio, pulsan 10-12 veces por segundo. De esta manera, mueven hacia atrás de la garganta, el mucus y las partículas, que uno traga o expulsa con la tos.
- Membrana mucosa: las vías respiratorias tienen una membrana mucosa que atrapa las partículas que traspasan los pelos de la nariz. El movimiento ondulante de los cilios las arrastra a la parte posterior de la garganta.
- Reflejo de la tos: la tos es un reflejo protector que expulsa la mucosidad y partículas extrañas que se acumulan en el sistema respiratorio.
- Respiración normal: la nariz entibia, enfría y humedece el aire que uno respira. Las vías respiratorias superiores llevan aire a los pulmones. Las inferiores se ramifican y terminan en sacos de aire llamados alvéolos. Ahí el oxígeno pasa a la sangre y los desechos vuelven a los pulmones para ser exhalados.
Mascarilla
No trae información impresa en el producto. Posee sencillas bandas elásticas. No se adhieren al rostro como un respirador, permitiendo el ingreso de contaminación por los costados. Está formada por una delgada capa filtrante.
Respirador certificado
Tiene certificación impresa visiblemente en cada respirador. Doble bandas elásticas que se fijan en dos puntos de la cabeza para asegurar un perfecto ajuste. El aire contaminado solo puede pasar por el material filtrante. Posee varias capas de material filtrante asegurando la filtración y retención del contaminante.
Se recomienda el uso de un respirador en ambientes contaminados con presencia de partículas, gases y vapores. Asimismo, en situaciones de exposición a smog o en áreas con posible contagio de gripe aviar, tuberculosis, AH1N1.
Respiradores reutilizables de medio rostro con filtros intercambiables
Los respiradores de filtros y cartuchos reemplazables son aparatos purificadores de aire. Cubren la nariz, la boca y la barbilla. Estos respiradores pueden ser utilizados con filtros o con cartuchos.
Los filtros poseen un material filtrante capaz de retener los polvos, neblinas y humos metálicos. Algunas variedades de filtros especializados traen carbón activado capaz de frenar la inhalación de gases y vapores a niveles molestos. Cuando se inhala, los sorbentes del cartucho filtran gases y vapores antes de que entren en las vías respiratorias.
Para que el respirador funcione bien, se debe usar el cartucho designado para el contaminante específico al cual el trabajador se encuentra expuesto. Los cartuchos pueden venir con filtros para atrapar polvos, humos metálicos o neblinas. En este caso se les llama cartuchos combinados o mixtos.
Los respiradores de medio rostro con filtro o cartucho reducen los contaminantes específicos de gas y vapor inhalados, a niveles seguros. El color de la etiqueta del cartucho indica contra qué contaminante protege.
Antes de usar el respirador se debe leer y entender todas las etiquetas e instrucciones. Los respiradores con cartuchos reemplazables para gas y vapor no protegen contra deficiencia de oxígeno, temperaturas extremas ni peligros que no se mencionen en la etiqueta.
Uso correcto
Un respirador no funciona bien a menos que lo ajuste perfectamente a su cara. De lo contrario, pasa aire contaminado por alrededor de sus bordes. Puede no ajustarse bien debido a barba o bigote, condiciones dentales y ciertos estados de la piel. Haciendo pruebas de ajuste positivas y negativas, se puede detectar filtraciones antes de entrar en el área peligrosa. Es imprescindible realizar siempre pruebas de ajuste antes de ingresar al área contaminada.
Chequeo de ajuste con presión positiva
Se debe cubrir con la mano la abertura de la tapa de la válvula de exhalación. Luego, exhalar suavemente. Si la pieza facial se expande levemente y no se sienten fugas entre la cara y la pieza, el ajuste es correcto.
Chequeo de ajuste con presión negativa
- Con filtro para partículas tipo disco: poner los pulgares en el centro de los filtros, restringiendo el flujo de aire hacia el tubo de respiración.
- Con cartuchos: cubrir el cartucho con las palmas de las manos para restringir el flujo de aire.
- Con filtros para partículas: usando los dedos, apretar las cubiertas del filtro hacia la pieza.
Inhalar suavemente. Si la pieza facial se contrae levemente y no se sienten fugas entre la cara y la pieza, el ajuste es correcto. Si se detecta fugas de aire, se debe reajustar la tensión de las correas para eliminar fugas. Si no se puede lograr un buen ajuste, no se debe entrar al área contaminada. Consultar al su supervisor.
Cuidado de su respirador
Lavar el respirador en agua tibia con detergente suave o jabón, como se indica en las instrucciones. Se debe mantener limpio e inspeccionarlo a menudo. Asimismo, se debe guardar en un lugar limpio, fresco y seco.
Como los cartuchos y filtros se hacen menos eficaces con el uso, se tienen que reemplazar cuando exista la presencia de contaminantes en ellos o según los reglamentos de la empresa. Avisar al supervisor si el respirador necesita mantenimiento.
Respiradores purificadores de aire forzado y con suministro de aire
El respirador purificador de aire forzado es un sistema de respiración motorizado que utiliza un ventilador para llevar aire filtrado que pasa a través de un filtro o cartucho a un casco, capucha o respirador de rostro completo. Existen diferentes configuraciones disponibles. Estos sistemas incluyen una unidad de motor ventilador, una pieza para la cabeza, una batería y, generalmente, un tubo por donde circula el aire.
Este tipo de equipos ofrecen un muy buen servicio de comodidad y protección. En especial, cuando los niveles de concentración de los contaminantes son altos. Lo mencionado se debe a que su nivel de protección son mucho mayor que un equipo tradicional que carece de motor ventilador (respiradores de libre mantención, de medio rostro y rostro completo sin aire forzado).
Los respiradores con suministro de aire son aquellos que proveen aire limpio de una fuente no contaminada, generalmente un compresor. Están diseñados para proveer aire limpio al trabajador. El aire se puede proporcionar desde un compresor (aire de planta respirable), bombas de presión baja o cilindros (aire comprimido). El aire limpio puede proporcionarse a capuchas, cascos, piezas faciales de cara completa, piezas faciales de media cara y piezas faciales de ajuste holgado.
Estos respiradores ofrecen muchas ventajas en comparación con la protección respiratoria tradicional. Un ejemplo es el enfriamiento o calentamiento del aire entrante. Cabe mencionado que solamente es necesario hacer pruebas de ajuste cuando se combinan con respiradores reutilizables. Los sistemas de suministro de aire, al igual que los respiradores de aire forzado, son una buena forma de ayudar a aumentar la comodidad, la productividad y la protección.
Cuidado de su respirador
Dado que el respirador con suministro de aire o de aire forzado suele usarse en áreas muy peligrosas, se debe observar que todo el equipo –máscara o capuchón, manguera, regulador y tanque o compresor, motor– funcione bien antes de entrar en un área contaminada. Seguir los reglamentos para cuidarlo y guardarlo en un lugar limpio y seco.
Respiradores libres de mantenimiento
Los respiradores libres de mantenimiento son la forma más común para protección respiratoria. Son aparatos filtradores del aire que cubren la nariz, la boca y la barbilla para atrapar partículas o gases y vapores del aire, antes de inhalarlos. Los respiradores funcionan si se ajustan bien y no se obstruyen o dañan por el uso excesivo.
Existen respiradores para partículas, especializados (estos poseen carbón activado) y para soldaduras (estos poseen una capa exterior ignífuga). Los respiradores libres de mantenimiento filtran el aire. Están hechos de fibras que atrapan y retienen partículas perjudiciales, o sorbentes que filtran gases o vapores mientras el trabajador respira a través del filtro. Bien elegidos y usados, permiten el paso libre del aire filtrado para que se pueda seguir respirando con seguridad.
Algunos respiradores libres de mantenimiento filtran polvos, humos metálicos y neblinas peligrosas. Hay también otros respiradores que protegen contra una combinación de contaminantes que hay en el área de trabajo. Los respiradores libres de mantenimiento no protegen contra deficiencia de oxígeno, temperaturas extremas ni concentraciones de polvos, humos metálicos, neblinas, gases y vapores que pasen de ciertos niveles.
Uso correcto
Solo un respirador bien ajustado puede proteger adecuadamente. Para ello, se debe seguir las instrucciones de ajuste. La forma de la cara, la barba o el bigote, condiciones dentales y ciertos estados de la piel pueden impedir un buen ajuste del respirador. Antes de usar cualquier respirador, se requieren pruebas de ajuste. Si el respirador no ajuste apropiadamente, no se debe ingresar al área contaminada. Consultar de manera inmediata al supervisor encagado.
Cuidado de su respirador
Los respiradores libres de mantenimiento están diseñados para que se descarte cuando su haya alcanzado el límite de su capacidad. Su eficiencia puede depender de la concentración del contaminante y del tiempo de exposición. Si se satura y resulta dificultoso respirar, es necesario reemplazarlo por uno nuevo.
Respiradores reutilizables de rostro completo
Los respiradores reutilizables de rostro completo son como los respiradores de medio rostro, con la diferencia que protegen también los ojos y la cara. Se ajustan alrededor de todo el rostro. Tienen filtros o cartuchos para atrapar polvos, humos metálicos o neblinas o gases y vapores del aire.
Pueden ser utilizados con cartuchos, los cuales contienen carbón activado capaz de absorber gases y vapores. A estos cartuchos se les puede poner un prefiltro para filtrar polvos, humos y neblinas del aire. Además, pueden ser utilizados con filtros capaces de contener los polvos, humos metálicos y neblinas, con mayor nivel de eficiencia.
Algunos de estos filtros pueden contener pequeñas cantidades de carbón activado para exposición a niveles molestos de vapores orgánicos o gases ácidos. Los respiradores reducen contaminantes específicos de gases, vapores o partículas –y en concentraciones específicas– según indica la etiqueta del cartucho o filtro. Estos respiradores no protegen contra falta de oxígeno, temperaturas extremas ni peligros no mencionados en etiquetas del cartucho o filtro.
Si el trabajador usa lentes ópticos, resulta necesario usar un inserto especialmente diseñado para este tipo de respiradores. Además, es importante preguntar al supervisor encargado acerca de las pruebas de ajuste.
Cuidado de su respirador
Antes de entrar en un área contaminada, inspeccionar minuciosamente el respirador por posibles daños. Asimismo, si éste tiene correas rotas, abolladuras, trizaduras y/o accesorios rotos. Es imprescindible seguir los reglamentos de la empresa para limpiar y guardar el respirador.
Publicado en la Revista Seguridad Minera nº125.
- Cómo garantizar la seguridad en trabajos en altura - 19 noviembre, 2024
- Importancia del examen de suficiencia médica para trabajos en altura - 19 noviembre, 2024
- Vibración en el trabajo: qué saber del impacto y prevención - 17 noviembre, 2024
Deja una respuesta