La salud mental en el entorno laboral ha cobrado una relevancia significativa en los últimos años, impulsada por el aumento de los índices de depresión vinculada al trabajo. Un reciente estudio realizado por Ipsos revela que el 77% de los peruanos encuestados se sintió estresado al punto de no poder manejar sus responsabilidades al menos una vez durante el año, mientras que un 57% indicó que debido al estrés laboral no pudieron asistir a sus centros de trabajo.
Este fenómeno de agotamiento extremo, conocido como burnout laboral, es una condición que se manifiesta cuando el estrés crónico supera la capacidad del trabajador para gestionarlo, afectando negativamente su productividad y el ambiente laboral. El burnout se presenta en tres dimensiones clave: agotamiento físico y emocional, despersonalización o desapego, y baja realización personal.
El agotamiento físico y emocional se caracteriza por dolores de cabeza, problemas de concentración, fatiga física y mental, y en algunos casos, cambios en el peso. La despersonalización o desapego se manifiesta mediante cambios repentinos en la actitud, pérdida de interés en las actividades laborales, problemas de concentración y toma de decisiones, dificultad para relacionarse y aumento del ausentismo laboral. Por último, la baja realización personal incluye irritabilidad, frustración, distanciamiento afectivo y negación de los síntomas, lo que puede afectar la vida personal.
Si no se toman medidas preventivas a tiempo, el burnout puede derivar en una depresión laboral, un trastorno complejo que afecta tanto la vida laboral como personal de los trabajadores.
Felipe Cuadra, co-fundador de Rankmi, subraya la importancia de que las empresas implementen estrategias de prevención desde el principio, fomentando un ambiente de trabajo positivo y promoviendo la salud mental. Entre las iniciativas recomendadas se encuentran:
- Programas de bienestar efectivos que concienticen sobre la salud mental y garanticen el bienestar de los empleados.
- Fomentar la comunicación abierta para que los colaboradores puedan abordar situaciones difíciles sin temor.
- Brindar un espacio seguro para que los trabajadores se sientan respaldados y apoyados por sus líderes.
El burnout laboral es un problema creciente que afecta a millones de trabajadores en diversos sectores. Por ello, es crucial que los líderes y los responsables de recursos humanos identifiquen los signos del burnout para evitar que la situación se torne crítica.
“Las organizaciones pueden fortalecer significativamente su cultura organizacional y el bienestar de sus colaboradores mediante herramientas estratégicas de medición como las encuestas de Clima, Engagement y Cultura, además de las Encuestas de Pulso”, comenta el especialista. Implementar estas encuestas periódicamente permite anticipar las dificultades que amenazan la satisfacción y el bienestar, construyendo así espacios de trabajo más saludables y productivos donde el talento pueda desarrollarse plenamente.
- Prevención de lesiones ergonómicas: claves para un entorno laboral seguro - 12 diciembre, 2024
- Importancia de los puntos de anclaje en trabajos en altura - 12 diciembre, 2024
- La importancia de invertir en la gestión de riesgos laborales - 10 diciembre, 2024
Deja una respuesta