Somos conscientes de que cuando se trata de proteger su audición, la protección insuficiente es perjudicial para usted y puede provocar daños auditivos debido a la sobreexposición al ruido. Sin embargo, no mucha gente es consciente de que la sobreprotección es tan mala o incluso peor.
Especialmente en un entorno de trabajo industrial, la conciencia de la situación es importante. Los empleados deben poder comunicarse de manera eficaz entre sí. Las señales de seguridad y otras señales no deben perderse debido al hecho de que las personas no pueden escucharlas.
El enfoque de “más es siempre mejor” puede llevar a una sobreprotección, lo que crea peligros para la seguridad, al no poder comunicarse de manera efectiva y la imposibilidad de escuchar las señales de seguridad.
Cuando usan demasiada protección auditiva, los empleados pueden distanciarse de su entorno. Esto puede darles la tendencia a quitarse la protección auditiva, lo que conlleva riesgos de seguridad y daños en la audición.
Piense en ello como llevar gafas de sol en interiores; es más protección de la necesaria y puede disminuir excesivamente la percepción del riesgo. Demasiada protección auditiva también puede conducir al aislamiento y, como consecuencia, a personas menos felices en su trabajo.
El objetivo debe ser obtener la mejor protección auditiva para una persona específica en una situación o entorno específicos.
Niveles de ruido
La protección auditiva debe llevar los niveles de ruido a un nivel aceptable, que en algunos países se encuentra en 85 dB. Los ruidos por encima de este nivel pueden dañar permanentemente la audición.
Por otro lado, llevar los niveles de ruido significativamente por debajo de este nivel aceptable, digamos fuera del rango de 70-85dB, con protección auditiva, tampoco es seguro. La sobreprotección se produce cuando los niveles de sonido se reducen tanto que la comunicación no puede tener lugar correctamente.
Protección auditiva sólida
Hay varios protectores auditivos sólidos hechos a medida en el mercado que cierran completamente el oído, para algunos propósitos específicos Por ejemplo, muchas personas tienen dificultad para dormir debido a que su compañero ronca, a patrones de trabajo poco naturales o porque viven en un entorno ruidoso.
Los tapones sólidos para los oídos y/o protección auditiva normalmente no son recomendables en el entorno de trabajo (industrial). Incluso los tapones para los oídos sólidos no bloquean todos los sonidos. Esto no es posible con ningún protector auditivo, ni siquiera con los hechos a medida, ya que el sonido no solo viaja a través del canal auditivo, sino que también viaja a través de la estructura ósea de la cabeza.
Orejeras o protección auditiva a medida
Cuando se trata de sobreprotección, el uso de orejeras presenta un riesgo mayor que cuando se usan tapones personalizados.
Por un lado, estos tapones para los oídos personalizados con filtros de alta fidelidad pueden colocarse al comienzo del día y quitarlos al final de la jornada. No sudan ni interfieren con las gafas o los cascos y son cómodos de usar durante horas y horas. Si se elige el filtro correcto, no es necesario sacarlos para escuchar. El habla permanece clara y no amortiguada.
Por otro lado, las orejeras a menudo se colocan en la parte posterior de la cabeza para escuchar el habla; esto presenta el riesgo de estar expuesto a ruidos fuertes y, por lo tanto, daño auditivo.
¿Cuál es el nivel más alto de protección auditiva?
Los protectores auditivos se clasifican de la clase 1-5. Muchos empleadores piensan que al solicitar protectores de Clase 5 (el nivel más alto de protección disponible) protegen la audición de sus trabajadores de la mejor manera. Incluso pueden insistir en un enchufe sólido, ya que creen que reducirá la mayor parte del ruido. Como se mencionó anteriormente, se debe buscar la mejor protección en situaciones específicas.
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