El documento «Plan tipo de movilidad segura y sostenible en la empresa», elaborado por el Observatorio Nacional de Seguridad Vial y el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) e Inspección de Trabajo y Seguridad Social de España, plantea la evaluación de riesgos laborales como “el proceso dirigido a estimar la magnitud de aquellos riesgos que no hayan podido evitarse, obteniendo la información necesaria para que el empresario esté en condiciones de tomar una decisión apropiada sobre la necesidad de adoptar medidas preventivas y, en tal caso, sobre el tipo de medidas que deben adoptarse”.
Si bien las precisiones técnicas de la evaluación de riesgos laborales derivados de la movilidad están basadas en la legislación española, hay aspectos fundamentales que pueden aplicarse a cualquier empresa. La evaluación de riesgos laborales, por ejemplo, debería considerar los siguientes puntos:
- Las condiciones de trabajo: cualquier característica del mismo que pueda tener una influencia significativa en la generación de riesgos para la seguridad y la salud del trabajador. Esta definición incluye tanto aspectos materiales (por ejemplo, las características del vehículo), como de organización (por ejemplo, el horario de trabajo).
- Las características del trabajador: con el fin de identificar la posibilidad de que el trabajador que lo ocupe o vaya a ocuparlo sea especialmente sensible, por sus características personales o estado biológico conocido, a alguna de dichas condiciones. Es fundamental analizar la compatibilidad de los factores individuales del trabajador con el puesto que ocupa.
«Los riesgos laborales derivados de la movilidad tiene la misma consideración que cualquier otra clase de riesgos y como tal deben ser debidamente identificados y evaluados para definir las medidas preventivas más adecuadas para eliminarlos o reducirlos y controlarlos. Para su evaluación se recurrirá a la metodología más adecuada en cada caso», precisa el texto.
Recuerda que la evaluación de riesgos de la movilidad es un proceso continuo que comienza con la recopilación de datos y termina con la implementación de medidas para eliminar o controlar los riesgos, estableciendo también prioridades y plazos para su implementación.
El proceso de evaluación debe ser realizado por personal técnico capacitado, quien analizará los datos, identificará los riesgos y propondrá medidas para prevenir accidentes y lesiones. Estas pueden incluir la formación de los trabajadores, la mejora de la señalización vial o la adquisición de vehículos más seguros.
Puedes leer aquí la guía completa de la planificación de movilidad.
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