En la utilización de mangueras de aire debemos tener presente que nunca se deben doblar bruscamente. De lo contrario, existe el riesgo de atascamiento a nivel de la válvula accionadora de estos elementos, con el consiguiente riesgo de fallo en el sistema y la no realización con normalidad de la maniobra de esta máquina o engranaje. Esto conlleva un riesgo asociado para el trabajador que actúe en ese momento en la máquina o sistema y posible daño a la máquina o mecanismo.
En las instalaciones fijas se utilizan tuberías multitubulares especializadas para el aire, cumpliendo con los requerimientos tanto en los materiales con que son construidas como en la manera en que son conectadas, pero si no se realiza un mantenimiento adecuado pueden llegar a presentar puntos de fuga de distintas magnitudes.
En la implementación de herramientas neumáticas es utilizado un color en la manguera, pero solo en los extremos. Los colores que pueden encontrarse son azul, rojo, amarillo y verde y están señalados con sistemas de códigos a base de colores.
Las mangueras de aire son útiles en la industria para varias operaciones. Sin embargo, son un peligro potencial si no se utilizan ni almacenan correctamente. Nos referimos a dos tipos de riesgos:
Riesgo de lesión a personas: cuando se exponen, manejan conductos a presión de aire, podemos sufrir lesiones debido a reventón, agresión, torsión de la manguera; efecto de latigazo de la manguera cuando el aire es liberado y, especialmente, si la sección de la manguera es pequeña; efecto de limpieza por la salida de aire con residuos incrustados que pueden salir expulsados.
Riesgo de lesión a las instalaciones o medio ambiente: por reventón, evacuación de fluido. Sin entrar en detalles, estos riesgos pueden originarse si la manguera no está en condiciones de uso debido a su antigüedad, operaciones pasadas o calidad del aire que circula por su interior. No entramos en aspectos químicos que propicien la degradación de la manguera.
Inspección y mantenimiento preventivo
El riesgo de lesiones aumenta a consecuencia de una utilización del equipo inadecuada, a causa de soportar condiciones o actuaciones de trabajo fuera de límites, sin llevar a cabo inspecciones sobre el estado de las mangueras y desconociendo sus características técnicas. Es responsabilidad del personal actuante en el trabajo a presión de aire utilizar la manguera adecuada, inspeccionándola previamente y realizando las inspecciones periódicas. Se recomienda que las mangueras a presión de aire tengan colores normalizados, evitando cualquier otra llamativa coloración que pueda llevar por confusión a sobrepasar los límites de trabajo. Realizar inspecciones sobre la manguera mediante objetos metálicos o punzantes incrementa el riesgo de roturas en el futuro.
De todas las inspecciones preventivas que hay que realizar sobre las mangueras, nombramos a continuación algunas de las inspecciones más comunes y sencillas, aunque la relación no es limitante: examinar periódicamente visualmente las generatrices siguiendo la longitud de la manguera, verificando si está recalentada, apelmazada, distorsionada, ondulada, retorcida, agrietada, abierta o desgarrada; inspeccionar la manguera para verificar si hay daños superficiales como abrasiones, cortes, quemaduras, dobleces, laminaciones u otras irregularidades; comprobar si tiene fugas de aire en el revestimiento.
Procedimientos recomendados
Siempre desconectar la manguera de aire y purgar todo el sistema de mangueras antes de aflojar una unión y al realizar trabajos de mantenimiento. El usuario debería ser la única persona que maneje la pistola, acoplamientos y mangueras, para evitar una manipulación incorrecta que provoque accidentes de trabajo al personal. No limpie las piezas con aire presurizado. El aire puede generar un resalto generando impactos. Si trabaja encima de andamios, no permita que las mangueras que utilice para sopletear (empujar) aire hagan contacto con el metal y que llegue la descarga a su mano.
Asegurarse de que todos los acoplamientos sean seguros para la presión. No ajuste ninguna tuerca manualmente con la manguera de aire conectada. Siempre presurice los componentes con una manguera de control en lugar de experimentar directamente con una manguera que suministra agua o aire a alta presión. Desafortunadamente, un gran número de empleados ha resultado herido e incluso muerto al manejar mangueras de aire a presión. El uso seguro y eficaz de las mangueras de aire a presión requiere una instrucción rigurosa y el procedimiento oportuno; de esa manera, evitaremos que el aire o su uso incorrecto provoque accidentes laborales, enfermedades o situaciones no deseadas.
Para la seguridad en el uso de mangueras de aire, es evidente que el principal riesgo es el que pueda presentarse a causa del desprendimiento de la manguera, proyectando a grandes velocidades el conector de acero, con el riesgo de producir heridas en cualquier parte del cuerpo del operario. El uso de mangueras defectuosas es suficiente causa de numerosos accidentes al año. Sin embargo, hay otra posibilidad de que se desprendan fragmentos de las mangueras no pesados y por lo tanto, el suceso no es reseñado y la frecuente manipulación y utilización de estas herramientas terminará por producir la pequeña explosión de la manguera. La vibración o manipulación de las mangueras a gran presión terminará por producir la pequeña explosión de la manguera.
Acciones de seguridad para el uso de mangueras de aire a presión se enumera en la siguiente lista: elaboración de métodos de trabajo seguros; prohibición de emplear mangueras defectuosas o deterioradas; comprobación del estado mecánico de las mangueras antes de ser utilizadas; empleo de mangueras reforzadas con malla textil o espiral de alambre; en los sistemas de manguera rígida no se autorizará el uso de mangueras ni su conexionado; prohibición de mantener retractilada la manguera; empleo de las conexiones e hilos propios de la manguera; evitar coincidencias de operarios en los campos de proyección del conector.
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